Menu Principal:
Construcción de la brazola en fibra
Hay varias maneras de ejecutar la brazola, se pude hacer de contrachapado de diversas formas, de madera maciza curvada al vapor o como en este caso en fibra de vidrio.
Esta solución es bastante rápida, y da una brazola de perfil bajo muy apropiada para este tipo de kayak.
Utilizando contrachapado de abedul de 15 mm por su calidad y suavidad de acabados, se construye un molde con la forma de la cubierta y un hueco con la dimensión interior de la brazola.
El molde se pinta, enmasilla, lija, se vuelve a pintar y se pule para obtener una superficie muy lisa y suave. Y para desmoldear se pinta con alcohol polivinílico y una vez ha secado una capa de cera.
Cuando la cera está completamente seca se puede empezar a aplicar capas de fibra y epoxy.
El epoxi se tinta para obtener una brazola de color negro en todo su espesor, esto hará que no noten mucho los posibles desperfectos futuros.
Cuando el laminado tiene un espesor de 1 mm aproximadamente se deja endurecer. Con ese espesor es bastante flexible, lo que facilita sacarlo del molde, que tiene un corte a lo largo que permite separarlo para desmoldear
Una vez fuera, se lija y se termina de laminar hasta que tenga un espesor de 4 o 5 mm. Se deja endurecer, se recorta a su dimensión final, y se lija concienzudamente.
Instalación de la brazola
Se coloca sobre la cubierta, y con ayuda del hueco de la misma, que tiene la dimensión interior de la bañera, se centra y se sujeta con dos gatos. Para poder marcar con un cutter el contorno exterior que a continuación se recorta. Esto nos deja el hueco justo para embutir la brazola en el contrachapado, dejándola perfectamente nivelada con la cubierta.
Se sujeta en su sitio punteando con cianocrilato, y se enfibra por encima y por debajo cuidando que la unión entre madera y brazola quede bien rellena de resina, sin burbujas.
La cinta de carrocero delimita hasta donde se coloca la fibra
En cuanto la resina endurezca un poco, se corta justo por la unión con la cinta. Para que se pueda cortar sin dañar las fibras subyacentes, es necesario que resina apenas haya empezado a endurecer y todavía esté ligeramente pegajosa
Antes de que la resina deje de estar pegajosa y para evitar tener que lijar, se procede a laminar la cubierta entera con una pieza de tela.
La tela llega hasta la mitad del costado, para que la cubierta y el casco queden unidos por la parte exterior.